El pastor Steve DeMoss, que realiza obras en varios puntos de África y dirije la fundación “Words In Deed”, pasó por una prueba muy grande en su vida: estuvo a punto de morir producto de un derrame cerebral. Sin embargo, según testifican sus allegados, un grupo de ángeles lo ministraron y lo sanaron.
El pastor estaba en la cama cuando un inmenso dolor sacudido su cuerpo. Su color cambió, dijo su esposa Sharon, y estaba segura de que estaba sufriendo un derrame cerebral.
La esposa Stephen DeMoss dijo que lo llevaron rápidamente al hospital donde la amiga de la familia Adura Haney estaba de servicio en el hospital como enfermera de urgencias.
Haney dijo que no tenía idea de que era DeMoss quien había sufrido el derrame, pero al enterarse dió aviso a un grupo de amigos del matrimonio que se ofrecieron a orar por el pastor.
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Luego de que los médicos le realizaron todos los exámenes pertinentes, determinaron que solo había un 4% de chances de que el pastor sobreviviese.
Preocupada por la noticia Adura Haney reunió a la esposa del pastor junto con otros amigos y comenzaron a interceder en oración por el pastor DeMoss. En el medio de la oración, Haney dijo:
“Pude ver ángeles en la habitación y se podían sentir. Le comenté a Sharon y ella también pudo sentirlos.”
Luego de haber intercedido en oración y haber sido testigos de tan magnífica experiencia, los familiares y amigos del pastor DeMoss quedaron a la espera de las noticias de los médicos.
Cinco días después, el pastor DeMoss, salío ileso del coma en el que se encontraba. Sin siquiera haber sufrido daños en su cerebro o cualquiera de sus otros órganos.
Según el médico que atendió a Steve, lo que sucedió fue algo inexplicable.
“Cuando ingresó supimos de inmediato que las probabilidades que sobreviviera eran escasas. Sin embargo, lo más llamativo e inexplicable es que luego del daño que sufrió su cerebro, el hecho de que no haya tenido ninguna secuela es inexplicable.” concluyó el doctor.
